
Casi siempre llego al lugar donde tengo que estar a tiempo. O llego antes, o mucho antes, o sobre la hora, pero nunca tarde. Si me demoro no supera los 5 minutos mas (mini bar).
Pero lo mas raro de todo es que muchas veces he estado en la calle, del otro lado de la ciudad, y sin muchos cálculos previos he salido pensando que voy a llegar tarde, pero a pesar de la espera en la parada del colectivo, el tránsito y la distancia desde donde me deja el colectivo hasta el destino final, ni aún el desconocimiento del lugar a donde voy, han podido hacer que me demore.
Estoy empezando a pensar que mas que una virtud es suerte, pero de cualquier forma la puedo hacer pasar por virtud cada vez que puedo.
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